domingo, 3 de abril de 2011

Manuel Miranda

Premios Rodolfo Walsh y Hugo Chávez.



Me permito felicitar sinceramente a la Universidad Nacional de La Plata en Argentina, por “el palo” que fue el haber concedido al Presidente Hugo Chávez, el premio Rodolfo Walsh 2011.

No es para menos, pues mientras “tirios y troyanos” discuten si existen o no meritos para otorgarle la distinción al Presidente de los venezolanos, entiendo que esto ha sido una fina estrategia para “internacionalizar” y/o promocionar el galardón, el cual hasta ese preciso momento, era completamente desconocido en el mundo y hasta en gran parte de Argentina.

Pero no tan solo eso… Mientras todos “se rompen el coco”, alabando o “rasgándose las vestiduras”, los organizadores del certamen deben estar riéndose “con la última muela de atrás” por el éxito de la actividad, para convertirse en tema predilectos de los círculos académicos, políticos, periodísticos e intelectuales del planeta.

Dado que:

- El premio es de “tercera categoría”, ya que las máximas distinciones que otorgan las Universidades son los de “Profesores Honorarios” y “Doctorados Honoris Causa”.

- La Universidad Nacional de La Plata, ni siquiera figura entre las primeras 500 del mundo, honor que en toda la Argentina, le corresponde a la Universidad de Buenos Aires, que figura en el escalafón 151.

- El Rodolfo Walsh tiene muy poco tiempo de incorporado (1997), apenas 14 años, que entendemos insuficientes para ser tomado en cuenta entre las “máximas distinciones del mundo”, como lo demuestra lo escasamente conocido.

Ahora bien:

Si hubiera sido un Doctorado Honoris Causa, otorgado por alguna Universidad de sólida reputación o algún tipo de distinción como los Nobel, Oscar, Grammy, Emmy, Miss Universo y hasta El Casandra… ¡¡Otro gallo cantaría!!

Mientras tanto, la Universidad de la Plata y su Facultad de Periodismo, se anotan tremendo golazo (en Argentina se juega fútbol), mientras el Presidente Hugo Chávez, luego de su gira internacional por Latinoamérica, retorna a Venezuela con trofeo en mano.

Sin duda alguna, una fina estrategia de posicionamiento, que amerita ser discutida en las facultades de mercadeo y publicidad.

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