miércoles, 7 de marzo de 2018

Manuel Miranda

Maduro en la Cumbre de las Américas.. ¿Por qué diablos no?



Consultando Wikipedia, vemos que las “Cumbres de Alto Nivel” entre Gobernantes, es “mecanismo de entendimiento” por excelencia para la resolución de conflictos globales o bilaterales.

Famosa la Cumbre de Yalta de 1945 que fue clave para darle fin a la Segunda Guerra Mundial…

Con el tiempo estos eventos se han ido incrementando con diversos tipos de “Cumbres” regionales o globales auspiciados por diversos organismos internacionales.

Cumbres que no traen soluciones, pero si muchos perjuicios, ya que los Gobernantes las usan para turismo político, figureo, copiar formulas impositivas y agenciarse contratos leoninos a cargo de lobistas o piratas para explotar nuestros pueblos.

Con motivo de la VIII Cumbre de las Américas Perú 2018, entendemos que existe la oportunidad de oro para que estos eventos, retomen la utilidad que les dieron origen: Solución de los problemas y amenazas contra los pueblos.

De esa premisa, es que entendemos oportuna que le sea reactivada la invitación al Presidente Nicolás Maduro para que pueda comparecer ante el pleno de sus homólogos de la región.

Independientemente de cualquier tipo de arreglo secreto que haya o no cumplido…

Independientemente de roces y malentendidos, o si su gobierno es o no legitimo o ajustado a la normativa legal nacional e internacional… Es bueno que este exponga “su verdad” y al mismo tiempo escuche “verdades” por parte de sus colegas del continente.

Con mayor razón, cuando la “guerra económica” que padece Venezuela en estos momentos, está afectando la economía de la región con el flujo masivo de venezolanos hacia Panamá, Costa Rica, Guatemala, República Dominicana, Estados Unidos, Canadá, Argentina, Ecuador, Colombia, Brasil, Perú, Trinidad & Tobago, Curazao, etc.

Muchos de esos países con sus propios problemas, y ahora sobrecargados con más problemas.

A eso sumamos la posición estratégica de Venezuela y su condición de país productor y exportador de combustibles, vitales para la economía regional y que gracias a esa “guerra económica” junto a las “sanciones” dictadas por los Estados Unidos, ahondan las necesidades de estos países que deben comprar a precios mucho más elevados a piratas o países más lejanos.

INVITAR A MADURO BAJO CONDICIONES.

Que el Presidente Nicolás Maduro manifieste querer comparecer “llueva, truene o venté”, resuelve el 75% del impasse.

Se supone que si Maduro es “el malo de la película”, haría todo lo necesario precisamente para “no dar la cara” ante el mundo… Es todo lo contrario.

En este caso, las condiciones serían:

- Que diga “su verdad” ante el Pleno a cambio de que también “le digan par de verdades” durante “el opening” transmitido por los medios al mundo.

- El resto de las verdades “sensibles”, pueden ser discutidas y resueltas “a puertas cerradas”

- La “declaración” que al final se emita, sirva de “Acuerdo de compromiso para Venezuela” entre Maduro y el resto de los gobernantes de la región.

- Luis Almagro, en su condición de Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA) deberá estar presente.

- La presencia del Presidente Maduro, no garantiza “reconocimiento” pero si “entendimiento”.

- No habrán “abrazos de oso” ni “apretones de manos” para fines de “consumo público”.

¿Maduro en la Cumbre de las Américas? ¿Por qué diablos no?

A modo que el retiro de la invitación, sea parte del show.




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