EN MIRANDA: Se juega el futuro político de Venezuela

A los enemigos es mejor tenerlos cerca, que tenerlos lejos

Refranero popular.

En mi modesta experiencia, cuando me solicitan consejos en el difícil arte de la estrategia electoral he expresado que las formulas matemáticas tienen valores diferentes en el “mundo de la alta política” en razón de que no son “ciencias exactas”

No me canso de expresar que cuando nos referimos a la política:

Hay
Sumas que suman.
Sumas que restan
Restas que suman
Restas que restan.

Y las divisiones, dividen.

Eso lo cito como ejemplo de cómo son las operaciones matemáticas en tan complejo mundo, cuyo resultado favorable resulta de la correcta aplicación de la fórmula correspondiente dependiendo de la coyuntura que se presenta.

Así acontecerá con el Estado Miranda en la interesante disputa que sostienen el Alcalde de Baruta Henrique Capríles Radonski y el todopoderoso candidato oficialísta a la reelección Diosdado Cabello por la Gobernación.

La gran paradoja del Estado Miranda…

El Gobierno Bolivariano no puede perder por “razones de seguridad” debido a que dicha demarcación prácticamente forma parte integral de Caracas en donde se asientan los Poderes Públicos y para evitar los desagradables incidentes ocasionados por Enrique Mendoza, cuando siendo Gobernador del Estado se prestó a la vagabundería del Carmonazo del 2001, poniendo la Policía Estatal al servicio de los golpistas y burdamente clausurando las transmisiones de Venezolana de Televisión (VTV).

Con mayor razón, cuando quien disputa la Gobernación de tan estratégico Estado es Capríles Radonsky, quien también se prestó a tan tamaño disparate, llegando al colmo de los colmos de verse involucrado en la agresión a la Embajada de la República de Cuba violando olímpicamente leyes, Constituciones y Tratados Internacionales, que rigen la propiedad privada, las relaciones entre los Estados y la “inmunidad diplomática”

Pero al mismo tiempo, su ÚNICA garantía de triunfo, recae en su actual incumbente el Gobernador Cabello, quien quiérase o no, constituye el principal líder del PSUV (después de Chávez), maneja “las ejecuciones políticas” del gobierno Bolivariano y tiene mal disimuladas aspiraciones a la Primera Magistratura Venezolana.

Diosdado es “el mal necesario” con que cuenta para preservar tan importante plaza, luego de este haberse quitado de su camino a varios otros aspirantes, tal como el “mega fusilamiento” del Estado Táchira*, José Vicente Rangel, Luís Miquelena, Acosta Carlez y “otras firmas”

Si no es Diosdado… ¿Quién?

Aparte de ello, la candidatura de Cabello se encuentra bien resguardada en la candidatura de Jesse Chacón; hombre de confianza del Presidente Chávez, co-partícipe del alzamiento contra el Presidente Carlos Andrés Pérez en el 1991, en el populoso Municipio Sucre, quién deberá explotar su relación con el mandatario venezolano ante los habitantes de dicho lugar y al que desde ahora proclamo vencedor en esa demarcación.

La oposición gana como quiera

La “derrota” de Capríles, envalentonaría e impulsarían a Diosdado Cabello a “dar el zarpaso final” y “golpe de timón” para buscar la candidatura Presidencial del PSUV para las Elecciones del 2013 (tomando en cuenta de que “por ahora” al Presidente Chávez le está vedado constitucionalmente), provocando de paso fricciones internas y “luchas de Poder”, que desde hace bastante tiempo los amigos leales del Presidente Chávez han advertido…

Capríles, después de Leopoldo López, constituye una de las reservas políticas con que cuenta Venezuela actualmente y su “metedura de pata” al participar en el “Carmonazo” podrían justificarse “en su juventud e inexperiencia”… Por lo que la muy probable victoria de Cabello, serian un gran estimulo para sus aspiraciones al derrotar a toda una figura “Presidenciable”.

Mientras que la “poco probable” victoria de Capríles, lo catapultarían como seguro candidato de la oposición en las Elecciones del 2013 al derrotar a uno de los “héroes” del contragolpe cívico-militar que repuso al Presidente Chávez el 13 de Abril del 2002, brazo ejecutor del gobierno y segundo líder en importancia del PSUV.

De paso, la oposición reconquistaría el Estado Miranda, para desde ahí, “volver a sus andanzas” erigiéndola en “plataforma y bastión”

Es mucho lo que está en juego en el presente y futuro político venezolano con lo que acontecerá en el Estado Miranda.

Por ello, “el mal necesario” encarnado en Diosdado Cabello ganará “a las buenas o a las malas” de eso que no quepan dudas, de lo que paradójicamente se beneficiará la oposición... Siempre y cuanto se despojen del "gallo-loquísmo" del que hacen galas y no sea derribada la prohibición a la reelección.

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