Por el anfitrión estar de aguajero “privando en dominicano”, lo barato le salió caro.
1 Alzando la mirada, Jesús vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca del tesoro. 2 Vio también a una viuda pobre que echaba allí dos blancas. 3 Entonces dijo: -De cierto os digo que esta viuda pobre echó más que todos. 4 Porque todos éstos de su abundancia echaron a las ofrendas; pero ésta, de su pobreza, echó todo el sustento que tenía.Lucas 21:1-4
¡¡Porque carajo!!
Si uno de sus hijos se va a casar nada más y nada menos que con una hija del todopoderoso magnate Lorenzo Mendoza, uno de los hombres más ricos de Latinoamérica, es para usted “botar la casa por la ventana” en caso de tener disponibilidad en recursos económicos “líquidos” y crediticios.
Con mayor razón, cuando toda la “crema y nata” de la rancia “sangre azul” venezolana, entre otros importantes invitados internacionales + la probable presencia de Manuel Peynado, el hijo de Jacinto Peynado y de la Vice Alcalde de Santo Domingo + Fernándo Hazoury, importante empresario turístico, estarán en ese evento.
Una cosa así, no era ni siquiera un “gasto” sino una gran inversión al quedar como parte de la gran familia Mendoza, con todos los privilegios y puertas que se abrirán en el futuro…
Por querer “privar en tiguere”, comprando langostas a precio de “jaiba”, hacer pasar bandejas de "hoja é lata" por plata y contratar combitos "de mala muerte" en lugar de darle los 300 mil dólares que exigía Juan Luís Guerra… Le salió er diablo y también el cólera para vergüenza suya y de su hijo.
Ahora bien, si el anfitrión del evento, en verdad no contaba con los recursos necesarios, en lugar de estar de aguajero, simplemente hubiera celebrado un evento bueno, bonito y barato…
Una boda sencilla y elegante, en donde ellos demuestren que lo mucho o poco que tienen, viene del trabajo duro y tesonero.
Se hubieran contratado una “orquesta de cámara” como Arts Nova, a un buen cantante como Hany Kauam, a una orquesta merenguera de calidad como Eddy Herrera y hasta se exportan una de las tantas “parranditas” para darle “toque venezolano” al evento.
Sirven vinos jóvenes de gran calidad y se hubieran preparado un buffet de categoría, a cargo del personal del mismo Casa de Campo, Raudy Torres o hasta se traen a Sumito Esteves, debidamente dispuestos los manjares en bandejas de porcelana y hasta con cubertería de plata alquilada.
Y si no tenía nada… Pues una boda intima, con los familiares y amigos más cercanos, un mariachi, unos brindis ¡¡Y San se acabó!!
Al fin y al cabo, lo IMPORTANTE era celebrar la boda y demostrar que en la misma no hay intereses de por medio, sino amor y atracción mutua.
LECCIÓN:
Pa la próxima, para los que algún día pretendan inventar con esas cosas, mejor no lo hagan… Los ricos “de cuna” saben muy bien distinguir lo bueno, para ellos es un insulto venirles con bandejitas disfrazadas de plata y comberos de mala muerte… Ellos saben de eso.
Si usted algún día, pretende “codearse” con los ricos y poderosos, no sea aguajero ni bultero, preséntese tal como es, pero tampoco no sea zalamero ni pedigüeño ni decir ni insinuar “que tá en olla”, aunque se lo lleve el diablo, para no darles mala impresión ni espantarlos.
Si va a celebrar una actividad, los invita y les da lo que tiene, pero bien limpio, con gusto y clase… Hasta un plátano hervido dispuesto en una hoja de su propio árbol bien limpiecita, es elegante.
Y si tiene algún “serrucho”, usted da lo que pueda, mucho o poco, pero nunca deje de poner lo que le corresponde.
Sea limpio en su casa, en su vestir, en su trato y en su espíritu… Esa es la clave de la elegancia y el trato hacia los demás, para que no le pase una vergüenza como la del cólera en tiempos de boda.
Dentro de un rato, con el capítulo 2, dedicado a la Monarquía de Quisqueya….
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