Los
juristas definen reos de “Estafa”: los que, con ánimo de lucro, utilizaren engaño bastante para producir
error en otro, induciéndolo a realizar un acto de disposición en perjuicio propio
o ajeno.
Algunos
lectores se sintieron molestos por nuestras afirmaciones de lo mucho que “nos
entristece” que los dominicanos se inclinen hacia “las corrientes izquierdistas
impulsadas por el Partido Demócrata”, expresadas en Usa Really.
Sentimos
mucho si los hemos ofendido, pero esto se debe a que a lo largo de la historia,
los demócratas hábilmente han estafado a los dominicanos. Vulgar estafa porque
durante muchos años, los líderes de esa organización política, han tenido un
discurso “incluyente” y “progresista” a favor de los derechos de las minorías,
pero este “discurso” no ha sido más que pose y “recurso electoral” para atraer
los votos que necesitan para alcanzar sus objetivos, para ya logrados, hacer
todo lo contrario en perjuicio de aquellos que han confiado en ellos mediante
el voto. Los hechos son contundentes:
1916:
Fue el demócrata Presidente Woodrow Wilson quien ordenó la intervención militar
en Republica Dominicana, para “garantizar el pago” de los empréstitos hacia ese
país. Cuando en realidad era para derrocar el gobierno progresista de Juan
Isidro Jiménez y boicotear el de Francisco Henríquez y Carvajal.
1965:
Fue el demócrata Presidente Lindon Johnson quien ordenó intervenir nuevamente
territorio dominicano, para evitar el retorno al Poder del también progresista Presidente
Juan Bosch.
Algunos
justificarán que estos hechos “pertenecen al pasado”, sin embargo, este engaño
ha continuado, aunque de forma más sutil, mediante el empleo de artilugios
legales y presiones diversas, tanto dentro como fuera del territorio
dominicano, así como otras medidas de impacto negativo dentro del territorio de
Estados Unidos, como las siguientes:
-
Construcción del muro en la frontera con México, durante la
administración del Presidente Bill Clinton.
-
Eliminación de la Ley “pies secos, pies mojados”, en contra
de los inmigrantes cubanos. Durante la administración del Presidente Barack
Obama
-
Deportaciones masivas de latinos, alcanzando cifras record,
durante esa misma administración.
Medidas
las cuales contribuyeron a la separación de familias, provenientes de todos los
litorales de Latinoamérica, las que incluyen Logicamente a los dominicanos, ya
que es de los países desde donde provienen la mayor tasa de inmigrantes,
utilizando todos los medios para llegar a los Estados Unidos.
Estas
medidas “progresistas”, no se han quedado ahí… También han “ido por más”, aun
mucho más sutiles y dañinas, enfocadas hacia la comunidad dominicana:
Durante
la administración de Barack Obama, fue designado el Presidente Bill Clinton
como “delegado especial” en Haití, puesto que fue refrendado por la
Organización de las Naciones Unidas (ONU), supuestamente para que este aportara
su experiencia y relaciones para la “reconstrucción” de ese país. Sin embargo,
los resultados han sido funestos, con medidas tales:
-
El “desplazamiento poblacional” en la isla Hispaniola, en la
que se pretende que la parte correspondiente a República Dominicana, asuma,
toda la carga migratoria y su secuela de problemas económicos que afectan a
Haití.
Con
ello de paso, tratando de evitar que los haitianos, puedan llegar a las costas
americanas, al tener esa vía de escape “segura en tierra firme”.
Para
la ejecución de este plan, se han invertido miles de millones de dólares en
pago de Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) aupadas desde la USAID,
combinadas con medidas de chantaje que van desde levantar cargos por
narcotráfico, sanciones económicas, hasta la denegación o concesión de
empréstitos contra las autoridades del gobierno de República Dominicana, para lograr
tal propósito, que ha hecho colapsar considerablemente los servicios e
institucionalidad de ese país.
-
La explotación minera a gran escala, en toda la isla
Hispaniola, siendo uno de los mayores concesionarios Anthony Rodhman, hermano
de la candidata Hillary Clinton, cuñado de Bill Clinton…. Esta explotación
minera, ha traído consigo la contaminación de atmosférica así como afluentes de
agua fresca, en contra de todos sus habitantes.
Recuerden
que en el debate escenificado entre Donald Trump e Hillary Clinton, fue
“ligeramente” mencionado, estos hechos de maldad y corrupción que amenazan
seriamente a la Hispaniola.
Y
para cerrar con broche de oro:
-
El deshonroso rol de los “representantes dominicanos” en
contra de aquellos que supuestamente representan, en todos los foros y
organismos legislativos que accionan.
Los
dominicanos cuentan con varios representantes, sean concejales, legisladores
estatales o miembros ante la Cámara de Representantes… ¡! Todos demócratas ¡!
Que no han hecho nada a favor de los suyos…
Los
más emblemáticos:
El flamante representante Adriano Espaillat, que mientras se proclama a favor de los que “no tienen vivienda”, como legislador siempre ha votado a favor de los intereses de “los caseros” o dueños de viviendas, quienes abusivamente elevan alquileres o ejecutan desalojos en Manhattan.
El flamante representante Adriano Espaillat, que mientras se proclama a favor de los que “no tienen vivienda”, como legislador siempre ha votado a favor de los intereses de “los caseros” o dueños de viviendas, quienes abusivamente elevan alquileres o ejecutan desalojos en Manhattan.
O de
escritores “progresistas” como Junot Díaz, quien es originario del sector,
quien nunca se ha pronunciado, pero que es muy presto para hacerlo a favor del
desorden migratorio en la Hispaniola.
En
definitiva: Los demócratas han sido unos estafadores contra los intereses de
los dominicanos, dentro y fuera de Estados Unidos. Por ello nos entristece, que
usualmente se inclinen por sus “ideas progresistas”.